Todas las cosas tienen un término. Cuando Ludovic desaparece de su vida al final del verano, borrando de un solo golpe los últimos cinco años de su existencia, Marc se siente desamparado. Con el propósito de huir de los recuerdos, todavía demasiado cercanos y dolorosos, se marcha de vacaciones a Cuba. ¿Cuantas veces habían soñado juntos este viaje, que ahora realiza él solo? Sin embargo, mientras camina por las calles llenas de polvo de La Habana, está muy lejos de pensar que bajo el sol imprevisible de los trópicos, su vida va a sufrir un cambio radical y que las cosas tienen también un principio. Págs. 196